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miércoles, 18 de diciembre de 2013

Fiebre botonosa mediterránea

La fiebre botonosa mediterránea es una enfermedad infecciosa aguda y zoonótica causada por la bacteria Rickettsia conorii y transmitida por la garrapata del perro Rhipicephalus sanguineus. Esta fiebre es endémica en muchos países de la cuenca del mediterráneo.
Su período de incubación varia de 1 a 3 semanas y tras él,  la enfermedad comienza de forma súbita con escalofríos, fiebre alta, dolores articulares y musculares, dolor de cabeza y fotofobia. A los 3-5 días se producen lesiones cutáneas (exantema con escara de color oscuro) que pueden aparecer en el lugar de la picadura de la garrapata o en otras zonas de la piel, siendo característicos en tronco y extremidades.


Lesión cutánea resultado de la fiebre botonosa mediterránea


Agente Etiológico

Las rickettsias forman parte de la familia Rickettsiaceae, conformada por cocobacilos pleomórficos de 0,3-1,5 micrómetros, parásitos intracelulares obligados. Su modo de transmisión es fundamentalmente mediante la picadura de las garrapatas del perro. Recientemente se han implicado otras especies de Ricketsia en cuadros clínicos similares como R. monacensis, R. massilliae y R. sibirica mongolotimonae.


Rickettsia

Clínica

La clínica es característica con un periodo de incubación variable de 1 a 3 semanas. Comienza con fiebre brusca, generalmente alta, cefalea, fotofobia, artralgias, mialgias y gran sensación de malestar general, que se acompaña a los 2 ó 3 días de la aparición de un exantema maculo-papular que afecta predominantemente a las extremidades (palmas y plantas). En menos de la mitad de los casos se puede apreciar en la zona de inoculación o de la picadura de la garrapata una escara (mancha negra). En algunas ocasiones el exantema es de aspecto purpúrico (vasculitis). En pacientes con enfermedades de base o en los que no se realiza un diagnóstico rápido el cuadro clínico se puede complicar con insuficiencia renal, meningoencefalitis, y fallo multiorgánico.


Diagnóstico

El diagnóstico inicial suele ser clínico, fundamentado en los antecedentes de vida en medio rural y convivencia con perros, así como una clínica compatible con la enfermedad. El diagnóstico específico se logra mediante:
  • Aislamiento de las rickettsias.
  • Cultivo - centrifugación con shell vial
  • Serología
  • IFI (Inmunofluorescencia Indirecta)
  • PCR (poco empleado en la actualidad)

Imagen de una garrapata a microscopio electrónico, estas trnasmiten esta enfermedad.

Tratamiento

El tratamiento se realiza con doxiciclina 100 mg 2 veces al día durante 1-5 días por vía oral. Sin embargo, es imprescindible consultar previamente al médico.





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